Salvat era el extremo e interior izquierdo del equipo reserva cuando, en septiembre de 1922, debutó con el primer equipo en un partido amistoso contra el Wacker Munich en Mestalla para cubrir las ausencias de Cordellat y Cubells. Lo hizo tan bien, que se quedó con los mayores para inaugurar el Campeonato Regional. Jugó los dos primeros partidos, cumpliendo pero sin destacar, pero pronto perdió la titularidad cuando regresaron los jugadores lesionados.

Esperó pacientemente su oportunidad participando en algunos amistosos en diciembre de ese año, pero cuando llegó, le tocó sufrir en un derbi de alta tensión contra el Gimnástico, en el que el Valencia salió goleado del campo de Vallejo (6-4). Al finalizar la temporada, Salvat abandonó la ciudad en busca de mejores oportunidades en el fútbol regional, perdiéndosele la pista.