Inicio del partido

0'

Surjak

15'

Pep Claramunt

21'

Descanso

45'

Salif KeitaSergio Manzanera

57'

Andrés EscoláQuino Sierra

67'

MijacRosizic

70'

José Antonio LicoJuan Planelles

73'

Salif Keita

78'

Bojak

82'

Final del partido

90'

El Valencia y el Hajduk, de Yugoslavia, han roto el fuego de los torneos veraniegos enfrentándose en el partido inaugural del Trofeo Internacional Ciudad de la Línea, en el que el Hajduk ha derrotado al conjunto español pr un solitario gol a cero, resultado que no refleja exactamente los méritos contraídos por uno y otro equipo, siendo el empate el resultado que hubiera tenido que imperar en el marcador.

Mucho más rodado ya el conjunto que prepara Ivic que el de su compatriota Ciric, que apenas acaba de comenzar la temporada, el Hajduk sorprendió en la primera parte a los aficionados locales con un juego tan práctico. Muchas jugadas de este primer tiempo fueron coreadas por el público que realmente
se divirtió mucho viendo las evoluciones de los yugoslavos que no quisieron ser meros comparsas del partido y que siempre demostraron una entrega ejemplar y a veces excesiva.

A la vista de los acontecimientos todo hacía sospechar que la diferencia se iba a acrecentar en el segundo tiempo y que los levantinos iban a acusar el esfuerzo del primer tiempo. No fue así y con los cambios que sucesivamente introdujo Ciric el Valencia se despertó y poco a poco fue pasando de dominado a
dominador, marcando la pauta del partido y gozando, ahora sí, de numerosas oportunidades de gol.

Con una defensa cerrada y un marcaje duro y agotador los hombres del conjunto azulgrana del Hajduk se escalonaban rápidamente para lanzar rápidos contaataques que ponían en serios aprietos a la zaga valenciana. Así, a los 15 minutos y tras repetidas tentativas, el internacional Surjac de un hábi cabezazo lograba el tanto que a la postre iba a resultar decisivo para el partido.

Bien es verdad que durante la primera parte el equipo yugoslavo mereció un mejor resultado, ya que aparte de los balones que despejaron los defensas, dos se fueron a estrellar a los postes, cuando todo el estadio, que se hallaba prácticamente lleno, cantaba ya el gol. Por contra, el Valencia no disponía en este período de ninguna ocasión clara para nivelar el marcador, notándose, aparte, de la deficiencia de su temprana forma física, un desacoplamiento entre los nuevos jugadores.

Más fuerte la parte de atrás que la de delante, el juego del Valencia se apoyaba principalmente en Claramunt y Jara que a pesar de lucir el once en la espalda adoptó una posición retrasada, lanzando a su compañeros de vanguardia. Ciertamente, ha merecido mejor suerte el Valencia en esta segunda parte y así lo reconoció el público, que al final se volcó ayudando a los españoles con gritos de aliento que al final no sirvieron para nada.