Inicio del partido

0'

Descanso

45'

Jaen

63'

Juanín

86'

Final del partido

90'

Temperatura agradable y bastante público en los graderíos. Los malos vientos que soplaban en el Arcángel, estuvieron a punto de convertirse en vendaval, cuando se llegó al descanso con el resultado de empate a cero, que no señalaba nada bueno para el Córdoba, ya que de todos era conocido su desfondamiento en las segundas partes. Pero es que en esta ocasión no se jugó bien en la primera. Solamente al final el Córdoba, dio sensación de equipo, poniendo en dos ocasiones muy apuradas la meta de Abelardo, bien resueltas por este, lo demás fue un juego insulso sin penetración a pesar de las facilidades defensivas del Valencia, sobre todo por el lado de Videgany.

El Córdoba jugó desacertadamente, fallando sobre todos Juanín y Rodri, que cada vez que cogían el balón se lo pasaban al contrario. El Valencia, jugó al contraataque, fiado en la velocidad do Blayet, y Poli que junto a Waldo, se internaron en varias ocasiones, que no fueron goles por falta de puntería, o también es justo reconocerlo por la intervención de García, que tuvo que arrojarse a los pies de Huertas en una ocasión, para evitar un gol seguro. Y nada más digno de mención, aparte de la mala actuación arbitral, que no quiso ver nada ni dentro, ni fuera del
área. Se llegó al descanso sin que niguna portería fuera perforada.

Pero llegamos a la segunda parte, y a todos nos sorprendió agradablemente ver un fútbol arrollador por parte del Córdoba, el dominio era abrumador produciéndose jugadas que no fueron goles por milagro. A los 10 minutos, se lesionó López, pasan do a los 20 a ocupar un puesto en la delantera, bajando Rodri a ocupar el puesto de lateral El Valencia, a pesar de su superioridad numérica, no cambió su táctica, es decir, siguió jugando al contraataque y esto le perdió. A los 18 minutos una jugada maravillosa de Jaén, la culmina con un fuerte chut que se cuela por la escuadra, pese a la estirada del meta valenciano. Trece minutos antes, Jara, perdió la ocasión más clara de abrir el marcador, al tirar fuera un balón con el meta batido.

Pero sigamos con el Córdoba. En el campo no mandó nadie más que él. Se suceden buenas jugadas, y en el minuto 30, en una internada de Jara, queda solo ante Abelardo, que salva la situación arrojándose a sus pies. Seis minutos más tarde, un defensa valenciano toca el balón con la mano, y el árbitro no sanciona la máxima. Llegamos al minuto 40, en el que Juanín, haciendo la pared con Arana, se plantó ante Abelardo, que sale y suavemente de pala, marcó el segundo gol.