Ficha de partido: 17.09.1988: FC Barcelona 1 - 1 Valencia CF

Ficha de partido

FC Barcelona
FC Barcelona
1 - 1
Valencia CF
Valencia CF

Equipos titulares

Timeline del partido

escudo local
Inicio del partido
0'
escudo visitante
Alexanco
12'
Miguel Ángel Bossio
44'
Descanso
45'
Fernando GómezPenalty fallado
49'
UrbanoLópez Rekarte
53'
López Rekarte
57'
Nando Martínez
64'
Zubizarreta
64'
Alexanco
65'
Roberto
70'
Emilio FenollNando Martínez
72'
AmorJulio Salinas
78'
Pedro AlcañizMiguel Ángel Bossio
80'
Fernando GómezAsist: Pedro Alcañiz
86'
Final del partido
90'

Estadio



Nombre: Camp Nou
Aforo: 99.354 espectadores
Ubicación: Barcelona (Barcelona) 
Inauguración: 24/09/1957

Rival: FC Barcelona

Records vs FC Barcelona

Máximo goleador: Mundo Suárez (18 goles)
Goleador rival: Messi (31 goles)
Mayor victoria: 4 - 0 (18.04.1979)
Mayor derrota: 0 - 7 (03.02.2016)
Más repetido: 1-1 (36 veces)

Crónica

Gran entrada en el Camp Nou, cien mil espectadores y 20 millones en taquillas según fuentes oficiales del club, en noche calurosa (18 grados) a la hora de comenzar el encuentro. El terreno de juego presentaba un lamentable aspecto, pelado y con aparatosas calvas, consecuencia de los últimos conciertos celebrados en el estadio. El Barça fue recibido con una gran ovación mientras el Valencia saltó al campo luciendo brazaletes negros de duelo por la muerte de su ex-jugador y capitán Sánchez Plá. Actuaron como capitanes Alexanco y Subirats. Cuando se retiró el primero expulsado, tomó el brazalete del equipo catalán Andoni Zubizarreta. El Barça lanzó nueve saques de esquina por cinco el Valencia.

Arbitró el inefable García de Loza, del colegio gallego. Tras un primer tiempo en que pasó bastante desapercibido, destapó la caja de los truenos en la segunda, castigando al Barcelona con un penalty más que discutible de Alexanco a Eloy. Lo lanzó Fernando y Zubizarrea le adivinó la dirección rechazando espectacularmente el balón así como el posterior remate de Flores a bocajarro, ganándose así una de las mayores ovaciones de la noche. Más que el árbitro, la pena máxima la decidió el linier, que estaba pésimamente situado, y al que García de Loza consultó con la mirada mientras acudía corriendo desde el centro del campo. El clima ambiental rozó el nivel de escándalo cuando poco después expulsó a Alexanco por doble amonestación. En total mostró tarjeta amarilla a Alexanco por protestar el penalty, a López Rekarte, también por protestar, a Zubizarreta por derribar a Eloy fuera del área, a Nando por juego violento, y finalmente la segunda amarilla, y consiguiente roja, al capitán azulgrana Alexanco, por una dura entrada sobre Fernando.

Goles: Minuto 25 de la segunda parte. Falta de Quique a Beguiristain cerca del lateral del área. La lanza el propio Txiki al interior del área, donde entra Roberto para conectar un cabezazo impecable abajo que hace inútil la estirada de Ochotorena (1-0). Minuto 41. En plena fase de dominio valencianista, ya en las postrimerías del choque, Alcañiz se va por la izquierda, lanza un centro raso y Fernando se anticipa a la acción de Zubizarreta llevando el balón a la red, encontronazo incluido entre ambos jugadores (1-1).

El árbitro les había castigado con un penalti inexistente. Después les expulsó al capitán por doble amonestación. Se quedaron con 10, pero sus cerebros les siguieron dando órdenes de continuar atacando. Era como si, en estos principios de temporada, la computadora creada por Johan Cruyff no admita la palabra defender o derrota. Llegaron a reponerse de esos dos golpes porque Zubizarreta estuvo genial y Roberto metió la cabeza para marcar la diferencia. Pero los valencianos no desaprovecharon su segunda oportunidad. Cuando superaban en número al rival materializaron el gol del empate. El Barcelona pudo perder ayer. Ganó un punto, pero el empate dejó cierto sabor a victoria.

El Valencia falló la primera oportunidad que el árbitro le puso en bandeja: el penalti. Zubizarreta, demostrando que también sabe de eso y acallando las voces destructoras que deseaban verlo fuera del Barcelona, rechazó el disparo de Fernando y controló, posteriormente, el remate de Eloy. Tampoco vió el Valencia la forma de aprovechar la ocasión que se le presentó cuando el Barcelona quedó en inferioridad numérica. El equipo azulgrana, en cambio, se recuperó pronto del segundo golpe. Cruyff fué más listo y rápido que Espárrago. Sobre la marcha decidió que Roberto ocupara la posición de Alexanco. Y sobre la marcha, Espárrago no tuvo tiempo de modificar sus líneas. Y también sobre la marcha, en esos minutos de desconcierto por parte del Valencia, que no sabía si seguir defendiendo o atacando, el Barcelona encontró el gol que se había hecho esperar 71 minutos. Roberto, la cabeza mágica de este equipo ideado por Cruyff, remató un centro de Beguiristain que no pudo desviar Ochotorena.

El Barcelona tuvo ayer la suerte de cara. El equipo no se descompuso en ningún momento, Tampoco el público le dejó. Cuando García de Loza, desde muy lejos de la jugada, apreció falta de Alexanco a Eloy en el área azulgrana, el público abroncó al colegiado. Y cuando Zubizarreta detuvo el disparo de Fernando y el posterior de Eloy, la afición encontró el revulsivo apropiado para apoyar con más fuerza a sus jugadores, algo insólito vistas la pasada temporada en el Camp Nou.

Ese apoyo fue mayor a raíz de la expulsión de Alexanco por doble amonestación. Y tuvo su fruto cuando el equipo se adelantó en el marcador jugado con 10 hombres. No decreció ni lo más mínimo cuando Femando marcó el tanto del empate a pocos minutos del final del encuentro. El público, que sabía que el partido estaba acabando, siguió apoyando al equipo. Quería que ganara, porque ahora también la afición piensa en atacar. Por su cerebro la palabra defender tampoco está computada. Cruyff está acostumbrando a los aficionados a su estilo.

La mejor oportunidad del Barcelona en la primera parte la salvó Ochotorena cuando faltaban tres minutos para el descanso. Llegó por el lado izquierdo, inactivo durante la mayor parte del encuentro, en una de las jugadas de Beguiristain que llegó hasta la línea final, centró y el flojo remate de cabeza de Roberto se lo encontró Ochotorena antes de que el balón cruzara la línea de gol. Esa jugada y otra que sucedió en el minuto 37, en la que Eusebio puso un toque de genialidad y Julio Salinas un remate de fábula a media vuelta, pero desviado, resumieron el dominio ofensivo del Barcelona en esos primeros 45 minutos. Aunque el balón la mayor parte de este periodo siempre estuvo en poder de los azulgrana, se puede decir también que el equipo valencianista controló la situación.

Se hizo la víctima, se dejó atacar. Esperó al Barcelona en su feudo, dejó que el equipo de casa llevara la iniciativa, que hiciera el esfuerzo. El uruguayo Víctor Espárrago, a cambio, dispuso unos controles sobre algunos jugadores del Barcelona. Boro fue fiel policía de Julio Salinas, Bossio persiguió siempre a Roberto, Subirats taponó a Soler, Fernando a Milla y Nando se ocupó por el lado derecho de sujetar a Eusebio. Fue un empate injusto, inmerecido para un equipo que sólo vino a eso y que teniendo material suficiente para jugar de otra forma se replegó en su zona y tuvo miedo a atacar. Pero lo cierto es que con eso le bastó para arrancar anoche el primer punto del Camp Nou.