Ficha de partido
Valencia CF
1 - 3
Dep. Coruña
Equipos titulares
Sustituciones
Timeline del partido
Inicio del partido
0'
Fran FigueroaIgnacio Ibáñez
25'
Descanso
45'
Pepe GálvezAsist: Lubo Penev
51'
Mauro Silva
53'
Fernando Gómez
59'
Paco Camarasa
59'
Donato
70'
Carlos ArroyoJuan Antonio Pizzi
73'
Bebeto
75'
Claudio
86'
AlfredoMariano Hoyas
87'
Final del partido
90'
Estadio
Rival: Dep. Coruña
Records vs Dep. Coruña
Máximo goleador: David Villa (10 goles)
Goleador rival: Bebeto (5 goles)
Más partidos: Vicente Asensi (20 partidos)
Mayor victoria: 7 - 1 (23.01.1949)
Mayor derrota: 1 - 5 (19.02.1950)
Más repetido: 2-1 (14 veces)
Crónica
El Deportivo de La Coruña se proclamó ayer campeón de invierno. Lo hizo como acostumbra esta temporada: sin brillantez pero con una contundencia que da miedo. Al Valencia no le bastó con derribar el muro que Liaño mantenía intacto desde que el Athletic de Bilbao lo vulnerase tres veces el pasado 10 de noviembre. El gol logrado por el joven Gálvez en el minuto 5 acababa con una racha de imbatibilidad que el Deportivo de Arsenio mantenía desde hacía 681 minutos.
Pero eso no rompió los esquemas del conjunto gallego, que anoche mostró en el estadio Luis Casanova todos los estigmas que. adornan a los equipos campeones. El Deportivo es un equipo solido, no se descompone nunca y tiene la suerte de su lado cuando más lo necesita. Tres mazazos de Mauro Silva, Bebeto y Claudio adornaron una remontada y un triunfo que define al Deportivo como el equipo más regular, firme y competitivo del fútbol español.
La primera parte fue un castigo para los aficionados. Héctor Núñez y Arsenio se empeñaron en aburrir al personal con sus exigencias tácticas, que apenas si permitieron a los jugadores marcarse algún remate a puerta digno de mención. Si acaso, un remate en semifallo de Bebeto en el minuto 17 que se estrelló en el travesaño.
El Valencia sólo contaba con la calidad excepcional de Gálvez, un talento llegado de Mallorca que jugó desterrado en la banda izquierda, en la que Mariano dio un recital de juego brusco y carente de buenas intenciones. Todo se decidió en la segunda parte del partido. En el descanso, Héctor Núñez debió decirles a sus hombres que se dejaran de obedecer sus órdenes, y los valencianistas se volcaron de salida sobre el portal de Liaño. El premio a la ambición fue el gol de Gálvez.
Pero 120 segundos después Maura Silva enmudeció Mestalla resolviendo un barullo en el área de González. Dos minutos después, Camarasa se ganó la expulsión al derribar la escapada en solitario de Bebeto. Héctor Núñez no supo reaccionar. El público comenzó a comprender que este Deportivo difícilmente pierde la cara ante sus rivales. Y más lo pensó cuando Bebeto abandonó su desafortunada racha en el minuto 67 envió otro tiro al poste en la antesala del último cuarto de hora del choque. El brasileño lanzó con picardía un golpe franco desde la izquierda, casi sin ángulo, pero González hizo la «cantada» de la noche al introducirse éI mismo el balón en su portería al no lograr blocarlo. Claudio remachó la feliz noche de los gallegos.
Pero eso no rompió los esquemas del conjunto gallego, que anoche mostró en el estadio Luis Casanova todos los estigmas que. adornan a los equipos campeones. El Deportivo es un equipo solido, no se descompone nunca y tiene la suerte de su lado cuando más lo necesita. Tres mazazos de Mauro Silva, Bebeto y Claudio adornaron una remontada y un triunfo que define al Deportivo como el equipo más regular, firme y competitivo del fútbol español.
La primera parte fue un castigo para los aficionados. Héctor Núñez y Arsenio se empeñaron en aburrir al personal con sus exigencias tácticas, que apenas si permitieron a los jugadores marcarse algún remate a puerta digno de mención. Si acaso, un remate en semifallo de Bebeto en el minuto 17 que se estrelló en el travesaño.
El Valencia sólo contaba con la calidad excepcional de Gálvez, un talento llegado de Mallorca que jugó desterrado en la banda izquierda, en la que Mariano dio un recital de juego brusco y carente de buenas intenciones. Todo se decidió en la segunda parte del partido. En el descanso, Héctor Núñez debió decirles a sus hombres que se dejaran de obedecer sus órdenes, y los valencianistas se volcaron de salida sobre el portal de Liaño. El premio a la ambición fue el gol de Gálvez.
Pero 120 segundos después Maura Silva enmudeció Mestalla resolviendo un barullo en el área de González. Dos minutos después, Camarasa se ganó la expulsión al derribar la escapada en solitario de Bebeto. Héctor Núñez no supo reaccionar. El público comenzó a comprender que este Deportivo difícilmente pierde la cara ante sus rivales. Y más lo pensó cuando Bebeto abandonó su desafortunada racha en el minuto 67 envió otro tiro al poste en la antesala del último cuarto de hora del choque. El brasileño lanzó con picardía un golpe franco desde la izquierda, casi sin ángulo, pero González hizo la «cantada» de la noche al introducirse éI mismo el balón en su portería al no lograr blocarlo. Claudio remachó la feliz noche de los gallegos.