Inicio del partido

0'

Morete

11'

Mario KempesAsist: Ángel Castellanos

22'

Enrique Saura

36'

Morete

38'

Descanso

45'

Jorge

71'

José PalmerDarío Felman

85'

Miguel GregoriLobo Diarte

88'

Mario Kempes

89'

Final del partido

90'

Un partido muy duro, difícil y laborioso para el Valencia este que ha jugado frente al Las Palmas. El equipo canario se había convertido para los valencianistas en eso que los franceses llaman bestia negra. Ganó el año pasado y el anterior, y su paso por Mestalla suponía el cese de entrenador (le costó
el cargo a Heriberto Herrera hace dos años y también le creó dificultades a Marcel Domingo en el pasado). En esta ocasión no ha sido así, pero cerca le anduvo, pues los canarios, que marcaron primero y que realizaron siempre un fútbol muy eficaz y efectivo, estuvieron quizás más cerca del empate que ese resultado de 3-1 que consiguió gracias al Kempes de sus mejores tiempos, ya cuando el partido estaba virtualmente concluido y se jugaba una prórroga, tal vez excesiva, por los descuentos habidos anteriormente.

En la primera parte, el encuentro ya se planteó con marcajes muy severos, entre los cuales resultaba quizás el más espectacular el de Carrete a Brindisi, y así prácticamente Carrete dejó de ser un defensa más para convertirse en perseguidor implacable de Brindisi por el medio campo, que es por donde deambulaba el cerebro del equipo canario. Esto que por un lado supuso una magnífica actuación del defensa y capitán valencianista, no redujo, por su parte el juego del estratega canario que siguió siendo el hombre que orientaba en profundidad a su conjunto tratando de que Morete aprovechara sus balones largos y de que todo el equipo funcionara bien. También Kempes era objeto de especial vigilancia por parte de Gerardo, pero Kempes, intentando volver por sus fueros y jugando más en punta que nunca (tal vez por eso el primer tanto que marcó estuvo bordeando el fuera de juego), volvió en cierto modo a ser el Kempes clásico marcando dos tantos que han supuesto la mejor productividad en este partido tan ardorosamente disputado.

Ya en la primera parte, el marcador se cerró con 2-1, con brotes de dureza hacia el final, por lo ajustada que estaba la contienda y sin que el equilibrio imperante hiciera adivinar hacia qué lado se inclinaría la contienda. En la segunda mitad dio la impresión de que podía resolverse a favor de los canarios, ya que Morete y Maciel tuvieron en dos ocasiones oportunidades muy claras de marcar, que se les escaparon por esas cosas raras que a veces suceden. También Pereira hizo lo suyo por evitarlo, pero eran jugadas hechas en las que el gol rondó peligrosamente el marco valencianista. Lo bueno que tuvo el Valencia en esta ocasión fue un espíritu de lucha infatigable que le mantuvo en pie de pelea hasta el último momento, y de ahí que cuando marcó Kempes el tercero y definitivo gol unos segundos antes se habían sacado des córners contra la puerta valencianista en situaciones bastante apuradas.

Total, que con ese 3-1 el Valencia ha ganado con cierta amplitud, pero el Las Palmas ha producido una magnífica impresión por su espíritu de combate, por su excelente fútbol y por el ritmo que tuvo desde el primero al último minuto. En definitiva, ha sido un encuentro de fuerte lucha, áspero, con buenas jugadas, pero en el que ha imperado ante todo y sobre todo la emoción.

Goles: 0-1, nueve minutos de juego. Falta contra el Valencia que saca Roque y remata Brindisi, rechazando Pereira apuradamente a córner. Sacado éste, Morete impulsa la pelota de cabeza a las redes. 1-1, 22 minutos. Jugada que inicia Carrete en medio campo, profundizando el Valencia, y Kempes, desde una posición dudosa de fuera de juego, consigue empatar batiendo a Carnevalli. 2-1, 36 minutos. Rechace de la defensa canaria que recoge Saura y consigue llevar el balón a la red. 3-1, 92 minutos. Balón despejado largo desde la defensa valencianista que alcanza Kempes, y aprovechando la descolocación de la defensa canaria, inicia un gran sprint hacia el marco, burla a Carnevalli en su salida y marca el gol definitivo.