Ficha de partido
FC Barcelona
4 - 0
Valencia CF
Equipos titulares
11
Sustituciones
Ninguno
Timeline del partido
Inicio del partido
0'
Verges
40'
Descanso
45'
Kocsis
50'
Evaristo
52'
Evaristo
83'
Final del partido
90'
Estadio
Rival: FC Barcelona
Records vs FC Barcelona
Máximo goleador: Mundo Suárez (18 goles)
Goleador rival: Messi (31 goles)
Más partidos: Juan Ramón Santiago (36 partidos)
Mayor victoria: 4 - 0 (18.04.1979)
Mayor derrota: 0 - 7 (03.02.2016)
Más repetido: 1-1 (36 veces)
Crónica
Aunque, como era natural suponer, al Valencia le interesaba más el partido del miércoles contra el Inter que su encuentro de anoche con el Barcelona en el estadio azulgrana, hay que reconocer que el conjunto valenciano hizo la oposición que deportivamente entraba en su obligación y, por lo menos, retardó todo lo que pudo la derrota que finalmente tuvo que encajar por un tanteo suficientemente abultado para que resulte claro que la superioridad estuvo del lado del Barcelona.
El Valencia pretendió salir del paso lo mejor que pudiera, empleando una táctica de marcaje que constituía en realidad un cerrojo encomendado a Quincoces. Para lograr este efecto, utilizó al extremo derecho, Ficha, encargándole la vigilancia de Evaristo, y distribuyó los restantes defensas y volantes de manera que el medio izquierdo, Egea, marcaba a Zaballa; el derecho, Piquer, a Kocsis; el lateral derecho, Mestre, a Martínez; y el izquierdo, Verdú, a Vicente.
También Ribelles y Coll ayudaron a los defensores. Una vez tomadas estas precauciones defensivas, el Valencia, creyó que había dominado la situación porque, efectivamente, a lo largo de la primera parte el Barcelona sólo consiguió marcar un gol y ya los treinta y nueve minutos a consecuencia de una jugada de ataque que inició Gracia y, con el intermedio de un cabezazo de Kocsis, remató Vergés a tres metros de la puerta. Durante toda la primera parte dominó principalmente el Barcelona, pero sus delanteros no habían logrado ser efectivos. Los siete córners contra la puerta del Valencia contra cero, dan una clara idea del sentido del dominio.
Dos goles aseguraron el tanteo. Sin embargo, el Barcelona, consiguió asegurar el resultado en dos minutos al principio de la segunda parte, con dos goles marcados a los cuatro y seis minutos, de los que fueron autores Martínez, al rematar un saque de esquina, sorprendiendo a Goyo, y Evaristo, con un tiro desde lejos a servicio de Zaballa. Estos dos goles trastocaron los planes defensivos del Valencia, que se vio obligado a cambiar su preocupación defensiva por la necesidad de atacar como el mejor remedio para su situación. Y, en efecto, coincidiendo la vez con cierto relajamiento del esfuerzo del Barcelona, el Valencia lanzó a sus hombres hacia el campo azulgrana.
Pero de la misma manera que hasta entonces el equipo barceionista había sabido dominar el juego de ataque y, aunque con cierto retraso, la efectividad había llegado para recompensar su esfuerzo, ahora, con tres goles a favor y, por lo tanto, ampliamente asegurada la victoria, el Barcelona acertó a oponerse a los intentos valencianistas que, a pesar de su insistencia, no tenían peligrosidad frente a la consistencia defensiva azulgrana. Segarra había sido el motor del ataque y Gensana fue el eje de la defensa. Detrás, el portero Sadurni estuvo muy seguro en sus intervenciones.
Durante una larga fase de la segunda parte, el Valencia tuvo la iniciativa, llegando a forzar tres corners casi consecutivos, pero después del tercero de ellos, en un contraataque del Barcelona, Martínez disputó la pelota y Evaristo aprovechó la ocasión para rematar desde lejos, obteniendo el cuarto gol azalgrana, a los treinta y ocho minutos. Después volvió a imponerse el Barcelona, que lanzó tres saquea de esquina antes de terminar el partido. En esta segunda parte, el Barcelona tiró siete corners por cuatro el Valencia. El arbitro Lacambra no estuvo demasiado acertado, habiendo perjudicado más al Barcelona que al Valencia con sus errores.
El Barcelona mereció la victoria por su mayor efectividad tan pronto logró superar la mayor velocidad que desarrolló el Valencia en las primeras fases del primer tiempo del partido.
El Valencia pretendió salir del paso lo mejor que pudiera, empleando una táctica de marcaje que constituía en realidad un cerrojo encomendado a Quincoces. Para lograr este efecto, utilizó al extremo derecho, Ficha, encargándole la vigilancia de Evaristo, y distribuyó los restantes defensas y volantes de manera que el medio izquierdo, Egea, marcaba a Zaballa; el derecho, Piquer, a Kocsis; el lateral derecho, Mestre, a Martínez; y el izquierdo, Verdú, a Vicente.
También Ribelles y Coll ayudaron a los defensores. Una vez tomadas estas precauciones defensivas, el Valencia, creyó que había dominado la situación porque, efectivamente, a lo largo de la primera parte el Barcelona sólo consiguió marcar un gol y ya los treinta y nueve minutos a consecuencia de una jugada de ataque que inició Gracia y, con el intermedio de un cabezazo de Kocsis, remató Vergés a tres metros de la puerta. Durante toda la primera parte dominó principalmente el Barcelona, pero sus delanteros no habían logrado ser efectivos. Los siete córners contra la puerta del Valencia contra cero, dan una clara idea del sentido del dominio.
Dos goles aseguraron el tanteo. Sin embargo, el Barcelona, consiguió asegurar el resultado en dos minutos al principio de la segunda parte, con dos goles marcados a los cuatro y seis minutos, de los que fueron autores Martínez, al rematar un saque de esquina, sorprendiendo a Goyo, y Evaristo, con un tiro desde lejos a servicio de Zaballa. Estos dos goles trastocaron los planes defensivos del Valencia, que se vio obligado a cambiar su preocupación defensiva por la necesidad de atacar como el mejor remedio para su situación. Y, en efecto, coincidiendo la vez con cierto relajamiento del esfuerzo del Barcelona, el Valencia lanzó a sus hombres hacia el campo azulgrana.
Pero de la misma manera que hasta entonces el equipo barceionista había sabido dominar el juego de ataque y, aunque con cierto retraso, la efectividad había llegado para recompensar su esfuerzo, ahora, con tres goles a favor y, por lo tanto, ampliamente asegurada la victoria, el Barcelona acertó a oponerse a los intentos valencianistas que, a pesar de su insistencia, no tenían peligrosidad frente a la consistencia defensiva azulgrana. Segarra había sido el motor del ataque y Gensana fue el eje de la defensa. Detrás, el portero Sadurni estuvo muy seguro en sus intervenciones.
Durante una larga fase de la segunda parte, el Valencia tuvo la iniciativa, llegando a forzar tres corners casi consecutivos, pero después del tercero de ellos, en un contraataque del Barcelona, Martínez disputó la pelota y Evaristo aprovechó la ocasión para rematar desde lejos, obteniendo el cuarto gol azalgrana, a los treinta y ocho minutos. Después volvió a imponerse el Barcelona, que lanzó tres saquea de esquina antes de terminar el partido. En esta segunda parte, el Barcelona tiró siete corners por cuatro el Valencia. El arbitro Lacambra no estuvo demasiado acertado, habiendo perjudicado más al Barcelona que al Valencia con sus errores.
El Barcelona mereció la victoria por su mayor efectividad tan pronto logró superar la mayor velocidad que desarrolló el Valencia en las primeras fases del primer tiempo del partido.