Ficha de partido
Real Zaragoza
1 - 1
Valencia CF
Equipos titulares
Sustituciones
Timeline del partido
Inicio del partido
0'
Esnáider
5'
Acuña
20'
Paco
33'
Vicente Rodríguez
36'
Rubén Baraja
42'
Descanso
45'
Gaizka Mendieta
54'
Pablo AimarJuan Sánchez
61'
Gaizka Mendieta (Pen.)
69'
Aguado
74'
Didier DeschampsGaizka Mendieta
76'
FerrónJuanele
76'
David AlbeldaRubén Baraja
80'
Esnáider
80'
MontenegroJamelli
84'
Final del partido
90'
Estadio
Rival: Real Zaragoza
Records vs Real Zaragoza
Máximo goleador: Manuel Badenes (9 goles)
Goleador rival: Duca (6 goles)
Más partidos: Fernando Gómez (25 partidos)
Mayor victoria: 7 - 0 (14.02.1943)
Mayor derrota: 1 - 6 (19.04.1959)
Más repetido: 1-0 (13 veces)
Crónica
El primer periodo fue un derroche físico de ambos conjuntos, el levantino por remontar el tempranero gol local y el aragonés por mantenerlo, lo que produjo un juego de fuerza en el que la mayor sensación de peligro en ambos frentes fueron las jugadas de estrategia en las que, además, saltaron chispas por coger la mejor posición.
Juan Eduardo Esnáider, en una genialidad, adelantó al Real Zaragoza a los cinco minutos provocando que el equipo de Héctor Cúper tomara el papel de conjunto local a partir de ese momento. El delantero argentino volvió a demostrar su importancia y su clase en el equipo de Luis Costa, ya que en el primer balón que recibió, en un contraataque local, se acomodó el balón y con un remate de rosca desde fuera del área lo puso junto al poste izquierdo de la portería de un Cañizares, que nada pudo hacer por evitar que llegara al fondo de las mallas.
El conjunto zaragozano se acomodó al juego de contragolpe, si bien el dominio valencianista se hizo cada vez más ostensible e hizo sufrir a los propietarios del terreno que, conforme transcurrieron los minutos, desaparecieron en ataque y sólo hicieron acto de presencia al final de este periodo con un par de buenas opciones para haber ampliado el marcador. A pesar de su dominio territorial, al equipo 'che' le falló el acierto en el remate a la portería de Juanmi porque casi todos sus disparos se fueron desviados.
El gran desgaste realizado del Valencia en el primer periodo pareció pasarle factura tras el descanso ya que el fuelle dio menos aire, lo que aprovechó el Zaragoza para tener más el balón y equilibrar el juego, aunque fueron los foráneos los que empataron en un penalti muy protestado de Aguado a Angulo, que fue lanzado por Mendieta en el minuto 69. El conjunto maño acusó el golpe moral y buscó el triunfo, más con el corazón que con la cabeza, algo que no consiguió porque también notó el trabajo realizado a lo largo de todo el encuentro.
Juan Eduardo Esnáider, en una genialidad, adelantó al Real Zaragoza a los cinco minutos provocando que el equipo de Héctor Cúper tomara el papel de conjunto local a partir de ese momento. El delantero argentino volvió a demostrar su importancia y su clase en el equipo de Luis Costa, ya que en el primer balón que recibió, en un contraataque local, se acomodó el balón y con un remate de rosca desde fuera del área lo puso junto al poste izquierdo de la portería de un Cañizares, que nada pudo hacer por evitar que llegara al fondo de las mallas.
El conjunto zaragozano se acomodó al juego de contragolpe, si bien el dominio valencianista se hizo cada vez más ostensible e hizo sufrir a los propietarios del terreno que, conforme transcurrieron los minutos, desaparecieron en ataque y sólo hicieron acto de presencia al final de este periodo con un par de buenas opciones para haber ampliado el marcador. A pesar de su dominio territorial, al equipo 'che' le falló el acierto en el remate a la portería de Juanmi porque casi todos sus disparos se fueron desviados.
El gran desgaste realizado del Valencia en el primer periodo pareció pasarle factura tras el descanso ya que el fuelle dio menos aire, lo que aprovechó el Zaragoza para tener más el balón y equilibrar el juego, aunque fueron los foráneos los que empataron en un penalti muy protestado de Aguado a Angulo, que fue lanzado por Mendieta en el minuto 69. El conjunto maño acusó el golpe moral y buscó el triunfo, más con el corazón que con la cabeza, algo que no consiguió porque también notó el trabajo realizado a lo largo de todo el encuentro.