Inicio del partido

0'

Descanso

45'

José Vilanova

48'

Final del partido

90'

Esta tarde han jugado los castellonenses contra el gran club valenciano de sus más acérrimas rivalidades. Mucha gente ha acudido al campo que poco ha faltado para que se llenara para presenciar la pelea. Pese a los años transcurridos sin que estos dos clubs se enfrentaran en matchs de competición oficial, se han reproducido antiguas estridencias y nerviosismos, ha vuelto a ser uno de aquellos matches de "máxima rivalidad", de juego malo, violento y aburrido para los que no estamos envenenados por las pasiones y no podemos emocionamos con el encone en las jugadas.

Ninguno de los equipos jugó, no se ligaron jugadas, porque su preocupación fué la caza del jugador y la violencia. Para colmo de desdichas estaba encargado del arbitraje el valenciano Monterde, y de una combinación así no podía salir nada bueno.

El Valencia, mucho más equipo, ha llevado siempre la iniciativa del juego y la mejor parte. Ha ejercido dominio intenso obligando a intervenir casi incesantemente al trío defensiva castellonense. El partido se ha decidido a poco de comenzar la segunda parte, al rematar Vilanova de un excelente tiro colocado un buen centro de Doménech.

Del Valencia la linea media ha sido lo más discreto. Del resto, como ya hemos dicho, no vale la pena de ocuparnos. Del Castellón, lo mejor el portero Marsá, que no parecía un jugador entusiasta y novel, sino un porterazo formado en uno de los momentos más brillantes de su vida deportiva.

No es cuestión de perder más tiempo y trabajo en comentar un partido de esta naturaleza. Como ha podido notar el lector, en el equipo local ha actuado el veterano jugador catalán Mauri, que habiendo entrado a formar como entrenador del Castellón, ha querido defender esta tarde sus colores en homenaje a la afición castellonense. Como no es de extrañar, ha sido una solemne equivocación.