Ficha de partido
Valencia CF
0 - 1
CD Logroñés
Equipos titulares
Sustituciones
Timeline del partido
Inicio del partido
0'
Tejera
9'
Morales
27'
Claudio LópezValery Karpin
45'
Descanso
45'
Morales
50'
Baltierra
57'
Antonio PoyatosJose Ignacio Sáenz
58'
MarínTejera
63'
Goran VlaovicXabier Eskurza
72'
Clotet
75'
Romario de SouzaPenalty fallado
77'
Jubera
78'
MinoManel
79'
NavarroBaltierra
79'
Patxi Ferreira
90'
Javi Navarro
93'
Final del partido
94'
Estadio
Rival: CD Logroñés
Records vs CD Logroñés
Máximo goleador: Pedja Mijatovic (3 goles)
Goleador rival: Poyatos (3 goles)
Más partidos: Fernando Gómez (18 partidos)
Mayor victoria: 4 - 0 (06.05.1990)
Mayor derrota: 0 - 2 (14.12.1986)
Más repetido: 0-1 (5 veces)
Crónica
Helada. Así se quedó la afición de Mestalla cuando vio cómo Morales marcaba en el minuto 26. El joven futbolista había aprovechado perfectamente un desconcierto en la zaga valencianista y había adelantado al Logroñés.
El Valencia no funcionó en la primera mitad, los jugadores de Luis Aragonés parecían perdidos en un mar de césped. Fernando, Moya y Karpin eran incapaces de superar la tupida defensa planteada por el técnico Miguel Angel Lotina. Romario, por su parte, vagabundeaba sin sentido, ya que no recibía balones en condiciones. Eso sí, antes del gol visitante Moya había tenido dos ocasiones claras para batir a Cedrún.
A partir del tanto de Morales, el conjunto de Luis Aragonés se convirtió en una suma de despropósitos. Los hinchas valencianistas comenzaron a dejar patente su disgusto con una sonora pitada justo cuando, al borde del descanso, José Ignacio remató muy alto una buena jugada trenzada por la delantera del Valencia, en la que al final se olvidó de marcar.
El enfado generalizado lo compartía el propio Luis Aragonés, que un minuto antes de concluir la primera mitad sacrificó a Karpin para dar entrada a Claudio López. Tras la reanudación, los valencianistas echaron el resto y aprovecharon el espacio cedido por un Logroñés que prefería sorprender a la contra. Primero fue Romario quien desperdició una ocasión solo ante el meta riojano. Luego fue Moya el que, con duro cabezazo, estuvo a punto de llevar el empate al electrónico. Pero el balón no quería entrar.
El de Hortaleza se la jugó; acumuló efectivos en ataque dando entrada a un nuevo delantero, el croata Goran Vlaovic. También decidió incluir el empuje de un hombre como Poyatos, pero el panorama no cambió. Y llegó la jugada estrella: Romario se escurrió en el área. No fue penalti, pero se pitó; el brasileño lo mandó a las nubes. El partido terminó tras este lance. Los minutos pasaron y el Valencia consumó la segunda derrota en casa. Pobre balance para un equipo que vio como su afición despedía con aplausos a su rival.
El Valencia no funcionó en la primera mitad, los jugadores de Luis Aragonés parecían perdidos en un mar de césped. Fernando, Moya y Karpin eran incapaces de superar la tupida defensa planteada por el técnico Miguel Angel Lotina. Romario, por su parte, vagabundeaba sin sentido, ya que no recibía balones en condiciones. Eso sí, antes del gol visitante Moya había tenido dos ocasiones claras para batir a Cedrún.
A partir del tanto de Morales, el conjunto de Luis Aragonés se convirtió en una suma de despropósitos. Los hinchas valencianistas comenzaron a dejar patente su disgusto con una sonora pitada justo cuando, al borde del descanso, José Ignacio remató muy alto una buena jugada trenzada por la delantera del Valencia, en la que al final se olvidó de marcar.
El enfado generalizado lo compartía el propio Luis Aragonés, que un minuto antes de concluir la primera mitad sacrificó a Karpin para dar entrada a Claudio López. Tras la reanudación, los valencianistas echaron el resto y aprovecharon el espacio cedido por un Logroñés que prefería sorprender a la contra. Primero fue Romario quien desperdició una ocasión solo ante el meta riojano. Luego fue Moya el que, con duro cabezazo, estuvo a punto de llevar el empate al electrónico. Pero el balón no quería entrar.
El de Hortaleza se la jugó; acumuló efectivos en ataque dando entrada a un nuevo delantero, el croata Goran Vlaovic. También decidió incluir el empuje de un hombre como Poyatos, pero el panorama no cambió. Y llegó la jugada estrella: Romario se escurrió en el área. No fue penalti, pero se pitó; el brasileño lo mandó a las nubes. El partido terminó tras este lance. Los minutos pasaron y el Valencia consumó la segunda derrota en casa. Pobre balance para un equipo que vio como su afición despedía con aplausos a su rival.