Ficha de partido
Valencia CF
1 - 0
Athletic Club
Equipos titulares
Sustituciones
Timeline del partido
Inicio del partido
0'
Matías Rubio
28'
Lubo Penev (Falta)
31'
Descanso
45'
ValverdeLambea
45'
Paco Camarasa
46'
Pepe GálvezÁlvaro Cervera
52'
Carlos ArroyoTomás González
64'
LacabegEstíbariz
64'
Andrinúa
86'
Final del partido
90'
Estadio
Rival: Athletic Club
Records vs Athletic Club
Máximo goleador: Mundo Suárez (19 goles)
Goleador rival: Zarra (20 goles)
Más partidos: Vicente Asensi (30 partidos)
Mayor victoria: 5 - 0 (03.04.1949)
Mayor derrota: 0 - 7 (10.10.1954)
Más repetido: 1-1 (23 veces)
Crónica
Valencia y Athletic, dos de los equipos que han iniciado la competición con más fuerza, uno co-líder y de cualquier forma, encaramados ambos en la parte alta de la tabla, sostuvieron anoche uno de los más enconados duelos de la jornada, que acabó de encumbrar al cuadro ché.
Los comienzos respondieron a ese equilibrio que muestra la tabla. El Athletic, sin descuidar su zona defensiva (la experiencia de Logroño era para asimilar) buscó el contragolpe y creó peligro ante el marco de Sempere en una falta directa lanzada por Garitano, que se perdió ligeramente desviada, y unos pasos sancionados a Sempere, que provocaron el lanzamiento de un libre indirecto del que tampoco sacó provecho el número "10" bilbaíno.
Pero el Valencia iba calentando los motores y poco a poco empezó a desarrollar su poderoso juego ofensivo. Merodeaba constantemente el área bilbaína y buscaba el disparo desde la media distancia. A la salida de un córner, un débil despeje de Valencia iba a los pies de Penev, que disparaba a bocajarro, pero Valencia enmendó el lance anterior con una buena intervención. El conjunto valenciano tomaba claramente la iniciativa y aunque no ejerciera un absoluto control conducía el partido. Mijatovic hacía rugir a la grada con el lanzamiento de una falta que buscaba la cruz del marco defendido por Valencia, pero el meta conjuró el peligro. El Athletic reaccionaba ya la salida de una falta de Rubio a Lambea, Julen Guerrero golpeaba el balón con la espalda y el cuero se estrellaba contra un poste. Pero la estocada la daba Lubo Penev en el lanzamiento de otra falta, ésta directa, en el minuto 30. El balón buscó la cruz izquierda del marco de Valencia y entró en el mismo como una exhalación. Con ese gol de Penev y al reanudarse el juego un buen servicio de Fernando a Penev permitía de nuevo al búlgaro buscar el marco, pero Valencia se lucía con una excelente intervención.
El juego era vivo, sin mucha coordinación pero yendo el balón de un marco a otro, alternativamente y manteniendo la incertidumbre en los graderíos. El Athletic buscaba más profundidad en sus ataques colocando a Valverde en la punta. El inconformismo de los rojiblancos se patentizaba en constantes contragolpes que ponían el "ay" en la grada, aunque no había pólvora en esas acciones.
Por su parte, el Valencia se perdía en un juego ramplón. En el minuto 31, Garitano estrellaba de nuevo el balón contra la madera. El cuadro local pasaba momentos incómodos. El Athletic se volcaba en busca del empate, el Valencia se defendía como podía e intentaba sorprender al contragolpe a un rival desmelenado. A cuatro minutos del final Mijatovic estrellaba el lanzamiento de una falta contra la madera. En la última jugada del partido, la mano de Sempere evitaba el empate en un disparo de Ciganda. Más emoción, imposible. El Athletic mereció quizás el empate, pero el Valencia demostró que este año habrá que contar con él.
Los comienzos respondieron a ese equilibrio que muestra la tabla. El Athletic, sin descuidar su zona defensiva (la experiencia de Logroño era para asimilar) buscó el contragolpe y creó peligro ante el marco de Sempere en una falta directa lanzada por Garitano, que se perdió ligeramente desviada, y unos pasos sancionados a Sempere, que provocaron el lanzamiento de un libre indirecto del que tampoco sacó provecho el número "10" bilbaíno.
Pero el Valencia iba calentando los motores y poco a poco empezó a desarrollar su poderoso juego ofensivo. Merodeaba constantemente el área bilbaína y buscaba el disparo desde la media distancia. A la salida de un córner, un débil despeje de Valencia iba a los pies de Penev, que disparaba a bocajarro, pero Valencia enmendó el lance anterior con una buena intervención. El conjunto valenciano tomaba claramente la iniciativa y aunque no ejerciera un absoluto control conducía el partido. Mijatovic hacía rugir a la grada con el lanzamiento de una falta que buscaba la cruz del marco defendido por Valencia, pero el meta conjuró el peligro. El Athletic reaccionaba ya la salida de una falta de Rubio a Lambea, Julen Guerrero golpeaba el balón con la espalda y el cuero se estrellaba contra un poste. Pero la estocada la daba Lubo Penev en el lanzamiento de otra falta, ésta directa, en el minuto 30. El balón buscó la cruz izquierda del marco de Valencia y entró en el mismo como una exhalación. Con ese gol de Penev y al reanudarse el juego un buen servicio de Fernando a Penev permitía de nuevo al búlgaro buscar el marco, pero Valencia se lucía con una excelente intervención.
El juego era vivo, sin mucha coordinación pero yendo el balón de un marco a otro, alternativamente y manteniendo la incertidumbre en los graderíos. El Athletic buscaba más profundidad en sus ataques colocando a Valverde en la punta. El inconformismo de los rojiblancos se patentizaba en constantes contragolpes que ponían el "ay" en la grada, aunque no había pólvora en esas acciones.
Por su parte, el Valencia se perdía en un juego ramplón. En el minuto 31, Garitano estrellaba de nuevo el balón contra la madera. El cuadro local pasaba momentos incómodos. El Athletic se volcaba en busca del empate, el Valencia se defendía como podía e intentaba sorprender al contragolpe a un rival desmelenado. A cuatro minutos del final Mijatovic estrellaba el lanzamiento de una falta contra la madera. En la última jugada del partido, la mano de Sempere evitaba el empate en un disparo de Ciganda. Más emoción, imposible. El Athletic mereció quizás el empate, pero el Valencia demostró que este año habrá que contar con él.