Ficha de partido
CA Osasuna
2 - 0
Valencia CF
Equipos titulares
9
10
11
Sustituciones
Ninguno
Timeline del partido
Inicio del partido
0'
Descanso
45'
Areta
55'
Recalde
75'
Final del partido
90'
Estadio
Rival: CA Osasuna
Records vs CA Osasuna
Máximo goleador: David Villa (7 goles)
Goleador rival: Echeverría (7 goles)
Más partidos: David Albelda (21 partidos)
Mayor victoria: 4 - 0 (02.05.2012)
Mayor derrota: 0 - 3 (15.12.1999)
Más repetido: 1-0 (13 veces)
Crónica
En un terreno embarrado se ha disputado este partido en el que los dos equipos contendientes se han batido con todo entusiasmo logrando superar las udificultades del ambiente para ofrecernos, en general, un fútbol soberbio, particularmente en la segunda parte, en la que se han visto jugadas de gran clase que han dado al partido un tono de gran emoción por lo nivelado de la lucha que, en general, ha sido un forcejeo constante de ambas delanteras, sumamente acertadas, frente a unas defensas que actuaron con éxito, aunque si bien es cierto que por las circunstancias del terreno se presentaban grandes dificultades para penetrar con rapidez, raseando el cuero por los innumerables charcos que existían en las zonas defensivas.
Aunque el Valencia jugaba un gran partido, de compenetración en todas sus líneas, que culminaban con avances insistentes, sobre todo por su ala derecha, en la que Mañó se mostraba peligrosísimo en sus escapadas, el Osasuna también engarzaba un juego perfecto, nacido de la gran labor que realizaban Marañón y Glaria II, que empujaban a su ataque, particularmente por el ala Areta III-Riquelme, creando grandes peligros a Goyo, que en fases del partido tuvo que intervenir constantemente para parar tiros difíciles y arriesgarse en salidas y despejes por alto y bombeados, y neutralizar numerosos saques de esquina, pues el Osasuna lanzó hasta catorce, por tres de su rival.
Con empate a cero terminó la primera parte, en la que el Valencia jugó a favor de un fuerte viento, y en la continuación el dominio correspondió íntegramente al equipo local, que, superándose en dificultades, supo aguantar mejor la brega, ahora sobre un terreno verdaderamente difícil, mostrando una mayor movilidad de anticipación a la jugada que le valió una neta superioridad que en ocasiones se convirtió en verdadero embotellamiento del equipo de Mestalla.
A los diez minutos de esta parte, centró Teres un balón por bajo, en posición de extremo izquierda, y Areta III, desplazado hasta el centro, remató de cerca a placer. A raíz de este gol osasunista, el Valencia se lanzó al ataque. Hasta ese momento Puchades era un cuarto defensa y Pasieguito, sirviendo al ataque, con Buqué de enlace, retrasado entre ambos. Pero el Osasuna se superaba en rendimiento, por mejor estabilidad sobre el terreno, y aprovechaba esa ventaja para practicar juego profundo y confiado ante el hecho de que los débiles y lentos avances del Valencia eran fácilmente cortados en el centro del campo.
A los treinta minutos, Teres bombeó un balón sobre la puerta defendida por Goyo, y Riquelme de espectacular tiro marcó el segund otanto. A continuación el Osasuna, con el partido ganado, hizo juego de contención pero sin dejar abandonado el ataque, que se bastaba con cuatro jugadores para crear grandes peligros a Goyo, que tuvo trabajo intenso, en contraste con el meta osasunista Eizaguirre, que no intervino más que en una ocasión para detener un fuerte disparo de Fuertes, muy peligroso.
Ganó, pues, el Osasuna merecidamente a un Valencia bien acoplado, pero que no pudo con el dominio que en la segunda parte ejerció el Osasuna, que se creció y se amoldó mejor al terreno para seguir presionando con gran codicia. En resumen; un gran partido del Valencia y una soberbia exhibición del Osasuna. Por el Valencia destacaron Mañó, sobre todos, después Quincoces y Sendra, estando Mestre muy seguro también, pero no tan eficaz. Por el Osasuna todos estuvieron en tarde de éxitos y al mismo nivel de rendimiento, por lo que justo es que los elogios se rindan al conjunto, que jugó maravillosamente. Aceptable el arbitraje del colegiado, señor Marrón.
Aunque el Valencia jugaba un gran partido, de compenetración en todas sus líneas, que culminaban con avances insistentes, sobre todo por su ala derecha, en la que Mañó se mostraba peligrosísimo en sus escapadas, el Osasuna también engarzaba un juego perfecto, nacido de la gran labor que realizaban Marañón y Glaria II, que empujaban a su ataque, particularmente por el ala Areta III-Riquelme, creando grandes peligros a Goyo, que en fases del partido tuvo que intervenir constantemente para parar tiros difíciles y arriesgarse en salidas y despejes por alto y bombeados, y neutralizar numerosos saques de esquina, pues el Osasuna lanzó hasta catorce, por tres de su rival.
Con empate a cero terminó la primera parte, en la que el Valencia jugó a favor de un fuerte viento, y en la continuación el dominio correspondió íntegramente al equipo local, que, superándose en dificultades, supo aguantar mejor la brega, ahora sobre un terreno verdaderamente difícil, mostrando una mayor movilidad de anticipación a la jugada que le valió una neta superioridad que en ocasiones se convirtió en verdadero embotellamiento del equipo de Mestalla.
A los diez minutos de esta parte, centró Teres un balón por bajo, en posición de extremo izquierda, y Areta III, desplazado hasta el centro, remató de cerca a placer. A raíz de este gol osasunista, el Valencia se lanzó al ataque. Hasta ese momento Puchades era un cuarto defensa y Pasieguito, sirviendo al ataque, con Buqué de enlace, retrasado entre ambos. Pero el Osasuna se superaba en rendimiento, por mejor estabilidad sobre el terreno, y aprovechaba esa ventaja para practicar juego profundo y confiado ante el hecho de que los débiles y lentos avances del Valencia eran fácilmente cortados en el centro del campo.
A los treinta minutos, Teres bombeó un balón sobre la puerta defendida por Goyo, y Riquelme de espectacular tiro marcó el segund otanto. A continuación el Osasuna, con el partido ganado, hizo juego de contención pero sin dejar abandonado el ataque, que se bastaba con cuatro jugadores para crear grandes peligros a Goyo, que tuvo trabajo intenso, en contraste con el meta osasunista Eizaguirre, que no intervino más que en una ocasión para detener un fuerte disparo de Fuertes, muy peligroso.
Ganó, pues, el Osasuna merecidamente a un Valencia bien acoplado, pero que no pudo con el dominio que en la segunda parte ejerció el Osasuna, que se creció y se amoldó mejor al terreno para seguir presionando con gran codicia. En resumen; un gran partido del Valencia y una soberbia exhibición del Osasuna. Por el Valencia destacaron Mañó, sobre todos, después Quincoces y Sendra, estando Mestre muy seguro también, pero no tan eficaz. Por el Osasuna todos estuvieron en tarde de éxitos y al mismo nivel de rendimiento, por lo que justo es que los elogios se rindan al conjunto, que jugó maravillosamente. Aceptable el arbitraje del colegiado, señor Marrón.