Ficha de partido
Valencia CF
3 - 0
Bayern Munich
Equipos titulares
Sustituciones
Timeline del partido
Inicio del partido
0'
Vicente Engonga (Pen.)
18'
Nerlinger
21'
Claudio López
22'
Claudio LópezAsist: Valery Karpin
26'
Descanso
45'
Gabriel MoyaAsist: Valery Karpin
46'
Antonio PoyatosGoran Vlaovic
48'
ZicklerKreuzer
55'
Mungh
61'
Patxi Ferreira
67'
WiteczecHaman
71'
Ziege
73'
JanckerRizzitelli
77'
Gaizka MendietaGabriel Moya
86'
Zickler
88'
Final del partido
90'
Estadio
Rival: Bayern Munich
Records vs Bayern Munich
Máximo goleador: Adrian Ilie (1 goles)
Goleador rival: Effenberg (2 goles)
Más partidos: Claudio López (4 partidos)
Mayor victoria: 3 - 0 (10.09.1996)
Mayor derrota: 1 - 4 (18.07.2015)
Más repetido: 1-1 (6 veces)
Crónica
Mientras el Valencia firmaba una gesta impensable ante un adversario de relieve, Romario permanecía impertérrito en la grada. Acompañado por su joven esposa y con sus ya casi inseparables gafas, contempló el partido desde una posición poco habitual para él, lejos de los focos y amparado en el gris anonimato. La afición levantina se olvidó muy pronto de él y vivió una noche inolvidable saldada con un espectacular triunfo. El Valencia intentó hacer frente al poderoso Bayern Munich con las armas escogidas por Luis Aragonés, velocidad y precisión al contragolpe. Tras unos primeros minutos titubeantes y de alto riesgo, el equipo levantino remontó el vuelo y llegó al descanso con una impensable ventaja de dos goles que ya hacía soñar con la proeza de dejar en la cuneta al campeón de la última edición del torneo.
Los inicios fueron desalentadores. El Valencia pareció excesivamente amedrentado, concedió terreno a su rival y quedó a merced del acierto de gente como Klinsmann o Rizzitelli. Hasta tres ocasiones claras se vivieron ante Zubizarreta, en especial un remate del técnico Scholl que rozó el palo izquierdo. Sin embargo, el aldabonazo llegó cuando Pairetto señaló un discutible penalti por derribo de Haman a Moya. Lanzó Engonga y abrió el camino de la gloria.
El Bayern notó el golpe, se sintió desorientado y el Valencia, refugiado en la velocidad y el contraataque, vivió a sus anchas. Con Fernando como jerarca en el centro del campo, Karpin inspirado en el pase, López colgado de su mágica zurda y Moya en perpetuo estado de excitación, el Valencia perdió los complejos. Rentabilizó además la debilidad de una defensa en la que faltaban sus dos centrales titulares y condujo a su ilusionada afición al borde del éxtasis.
Una precisa asistencia de Karpin rematada por la seda del zurdo López condujo al 2-0. Y en la reanudación, llegó el delirio. Otra vez Karpin firmó una mágica asistencia para la cabeza del diminuto Moya, más listo que los centrales. Apenas un minuto antes, el palo había vuelto a salvar al Valencia, definitivamente aliado con los astros. En tan difícil situación, el Bayern optó por la vía expeditiva de situar sobre el césped a una legión de delanteros. La mejor noticia para un equipo de Luis Aragonés, siempre refugiado en la rapidez de unas contras mortales. El partido estuvo más cerca del 4-0 que del primer gol alemán. Bajo la lluvia, el Valencia rozó una goleada de escándalo, entusiasmó a una grada rendida y cimentó su posible clasificación.
Los inicios fueron desalentadores. El Valencia pareció excesivamente amedrentado, concedió terreno a su rival y quedó a merced del acierto de gente como Klinsmann o Rizzitelli. Hasta tres ocasiones claras se vivieron ante Zubizarreta, en especial un remate del técnico Scholl que rozó el palo izquierdo. Sin embargo, el aldabonazo llegó cuando Pairetto señaló un discutible penalti por derribo de Haman a Moya. Lanzó Engonga y abrió el camino de la gloria.
El Bayern notó el golpe, se sintió desorientado y el Valencia, refugiado en la velocidad y el contraataque, vivió a sus anchas. Con Fernando como jerarca en el centro del campo, Karpin inspirado en el pase, López colgado de su mágica zurda y Moya en perpetuo estado de excitación, el Valencia perdió los complejos. Rentabilizó además la debilidad de una defensa en la que faltaban sus dos centrales titulares y condujo a su ilusionada afición al borde del éxtasis.
Una precisa asistencia de Karpin rematada por la seda del zurdo López condujo al 2-0. Y en la reanudación, llegó el delirio. Otra vez Karpin firmó una mágica asistencia para la cabeza del diminuto Moya, más listo que los centrales. Apenas un minuto antes, el palo había vuelto a salvar al Valencia, definitivamente aliado con los astros. En tan difícil situación, el Bayern optó por la vía expeditiva de situar sobre el césped a una legión de delanteros. La mejor noticia para un equipo de Luis Aragonés, siempre refugiado en la rapidez de unas contras mortales. El partido estuvo más cerca del 4-0 que del primer gol alemán. Bajo la lluvia, el Valencia rozó una goleada de escándalo, entusiasmó a una grada rendida y cimentó su posible clasificación.