Ficha de partido
Real Zaragoza
2 - 0
Valencia CF
Equipos titulares
Sustituciones
Timeline del partido
Inicio del partido
0'
Hugo Guillamón
16'
Narváez
19'
Gámez
44'
Descanso
45'
FranchoZapater
45'
Omar AldereteMouctar Diakhaby
45'
RatónCristian Álvarez
45'
Thiery CorreiaJoseda Menargues
45'
Adrián GonzálezIgbekeme
58'
Diego LópezDenís Chéryshev
58'
Fran PérezJason Remeseiro
58'
NietoNarváez
58'
Ángel LópezGámez
58'
Alessandro BurlamaquiHugo Guillamón
66'
Jesús VázquezJosé Luis Gayá
66'
Manu VallejoMaxi Gómez
66'
Rubén SobrinoGonçalo Guedes
66'
Alessandro Burlamaqui
71'
Javi RosEguaras
72'
LarrazábalBermejo
72'
PucheChavarría
72'
CarbonellAzón
82'
Javi HernándezJair
82'
Final del partido
90'
Estadio
Rival: Real Zaragoza
Records vs Real Zaragoza
Máximo goleador: Manuel Badenes (9 goles)
Goleador rival: Duca (6 goles)
Más partidos: Fernando Gómez (25 partidos)
Mayor victoria: 7 - 0 (14.02.1943)
Mayor derrota: 1 - 6 (19.04.1959)
Más repetido: 1-0 (13 veces)
Crónica
Pimer revolcón. Duro. A 28 de julio no hay que rasgarse las vestiduras, pero el equipo de Bordalás se llevó una buena pana del Zaragoza El equipo maño esgrimió un buen recital de recursos y mostró calidad de sobra para cambiar lo que le ha pasado los últimos años en Segunda.
Dicen los entendidos que para que un equipo funcione como un reloj la base es la pareja de centrocampistas. Ese doble pivote que combine destrucción y creación que suele darle la cuerda que necesita al equipo. Pues a Bordalás el centro del campo le huele a chamusquina. Nada que reprochar a Guillamón (titular indiscutible en el pivote desde que comenzó la pretemorada por falta de efectivos) o a Javi Guerra, filial con maneras pero al que no vamos a ver durante la temporada. Pero claro con esta pareja cuando juegas contra un rival con algo de orden y nivel, se te ven las costuras.
Ante el Zaragoza la primera parte del Valencia fue preocupante. De no ser por Rivero (hizo paradas de mucho mérito) la cosa se podía haber ido al descanso con un 0-3 sin exageraciones. Pero lo más preocupante fue que el equipo maño dominó casi a placer en la medular y tuvo llegadas de todo tipo. El control fue total del equipo de Segunda mientras los de Bordalás perseguían sombras por el campo. Malas sensaciones. Y eso que debutaron Maxi y Gayà, que casi recién aterrizados fabricaron la única opción de peligro del Valencia antes del descanso.
Los goles maños fueron parecidos. Balón recuperado en la medular, apertura a banda, desborde y centro al área para que primero Narváez y luego Gámez, pusieran en ventaja a los maños, que mostraron mucha personalidad.
Tras el paso por el banquillo Bordalás se dio cuenta de que el centro del campo no funcionaba y decidió hacer cambios. Sentó a Javi Guerra y el acompañante de Guillamón fue.... Diakhaby. Claro, la cosa no mejoró. De hecho, el Zaragoza siguió acumulando ocasiones que desbarataba una y otra vez Rivero, el mejor pese a la derrota.
Dicen los entendidos que para que un equipo funcione como un reloj la base es la pareja de centrocampistas. Ese doble pivote que combine destrucción y creación que suele darle la cuerda que necesita al equipo. Pues a Bordalás el centro del campo le huele a chamusquina. Nada que reprochar a Guillamón (titular indiscutible en el pivote desde que comenzó la pretemorada por falta de efectivos) o a Javi Guerra, filial con maneras pero al que no vamos a ver durante la temporada. Pero claro con esta pareja cuando juegas contra un rival con algo de orden y nivel, se te ven las costuras.
Ante el Zaragoza la primera parte del Valencia fue preocupante. De no ser por Rivero (hizo paradas de mucho mérito) la cosa se podía haber ido al descanso con un 0-3 sin exageraciones. Pero lo más preocupante fue que el equipo maño dominó casi a placer en la medular y tuvo llegadas de todo tipo. El control fue total del equipo de Segunda mientras los de Bordalás perseguían sombras por el campo. Malas sensaciones. Y eso que debutaron Maxi y Gayà, que casi recién aterrizados fabricaron la única opción de peligro del Valencia antes del descanso.
Los goles maños fueron parecidos. Balón recuperado en la medular, apertura a banda, desborde y centro al área para que primero Narváez y luego Gámez, pusieran en ventaja a los maños, que mostraron mucha personalidad.
Tras el paso por el banquillo Bordalás se dio cuenta de que el centro del campo no funcionaba y decidió hacer cambios. Sentó a Javi Guerra y el acompañante de Guillamón fue.... Diakhaby. Claro, la cosa no mejoró. De hecho, el Zaragoza siguió acumulando ocasiones que desbarataba una y otra vez Rivero, el mejor pese a la derrota.