El 7 de agosto de 1967 se ofició la presentación de la primera plantilla del Valencia CF, cuyo primer acto fue una misa en la Basílica de la Virgen de los Desamparados. Posteriormente, la expedición valencianista se desplazó hasta Mestalla para participar en un almuerzo, durante el cual se entregó a los futbolistas recién incorporados la insignia de oro del club.
Se aprueba el mayor presupuesto de la historia
Once días más tarde, se celebró la junta general ordinaria del Valencia CF en los locales de la Federación Valenciana de Fútbol, situada en la calle Barón de Cárcer. En ella se aprobaron la memoria y el balance de la temporada anterior, así como el presupuesto para la presente campaña, que ascendía a 41 millones de pesetas, el mayor en la historia del club.
Sin fichajes de renombre
El Valencia esta temporada no realizó ningún fichaje de renombre. Tan solo ascendió a jugadores del Mestalla como Andrés, Nolito y Catalá Benet. También fichó a Jorge Cayuela, jugador español criado en la emigración belga que acabó por asentarse en el mismísimo Anderlecht. El Valencia se lo trajo licitando contra el Espanyol. Por todo ello hubo un superávit de 16 millones de pesetas.
El Valencia viaja a Marruecos en la pretemporada
El Valencia inició su preparación de pretemporada el 22 de agosto de 1967 contra Estudiantes de la Plata, en partido amistoso homenaje a la afición valencianista que se disputó en Mestalla y que concluyó con 2-0 a favor del equipo local (Claramunt y Jara).
El creciente prestigio del Valencia reforzado con la consecución de la Copa de 1967, motivó que los principales torneos veraniegos quisieran contar con la escuadra che. El 27 y 28 de agosto, el Valencia se desplazó hasta Casablanca para participar en la VI edición del trofeo Mohamed V, junto al Ruda Zvevda de Bulgaria, el FAR Rabat de Marruecos y el Dukla de Praga checoslovaco. En la primera semifinal, el Zvezda derrotó al Valencia por 2-0, por lo que el equipo valenciano disputó el partido por el tercer y cuarto puesto contra el Dukla de Praga, encuentro que finalizó con empate (2-2) y se resolvió por la suerte de los penalties, en la que el Valencia se impuso y se adjudicó la tercera plaza.
Campeones del Trofeo Carranza
Pero sin lugar a dudas el plato fuerte de la pretemporada era el trofeo Ramón de Carranza, que se venía celebrando en Cádiz desde hacía trece años. El Valencia se midió en la semifinal, disputada el 2 de septiembre, al Peñarol de Montevideo, al que derrotó por 2-0 con tantos de Paquito y Waldo. Al día siguiente, Valencia y Real Madrid jugaron la final del trofeo. El Valencia se adelantó en el marcdor gracias a un gol de Jara. Antes de que finalizara el primer tiempo, Zoco igualó el marcador. Pero mediada la segunda parte, Waldo aprovechó una asistencia de Ansola para materializar el 1-2 definitivo. El Valencia se adjudicaba de esta forma el prestigioso trofeo gaditano, conquistando la opción de participar en la siguiente edición.
Cuartos en la Liga
Tras una intensa pretemporada, comenzó la liga, en la que el Valencia no hizo una gran primera vuelta pero logró salir de la mala racha con buen juego que dio lugar a una racha de 13 partidos invictos. Al final, el equipo finalizó cuarto en la clasificación. En la Copa del Generalísimo de este año el Valencia fue eliminado en los cuartos de final por el Atlético de Madrid. Anteriormente eliminó al Gimnástica de Torrelavega y Español.
Debut en la Recopa de Europa
En la Recopa de Europa, el Valencia tenía derecho a participar al haber ganado la Copa del Generalísimo del año anterior. Logró vencer en los dos primeros enfrentamientos a Crussaders de Belfast y al Estrella Roja de Bucarest. En el tercero perdió contra el Bayern de Munich alemán.
Campeonato Nacional de Liga
El Campeonato Nacional de Liga comenzó el 9 de septiembre de 1967. En el primer partido de Liga, se presentó el equipo junto al trofeo Ramón de Carranza recién conseguido. El público valenciano ovacionó al equipo. Para concluir una noche tan especial como aquella, el Valencia ganó con buen futbol al Betis por 2-1, con goles de Ansola y Roberto.
Pero la derrota encajada en la segunda jornada ante el Sabadell en la Creu Alta representó la primera de las decepciones que el equipo brindaría a su afición aquella temporada. Mundo abroncó a los jugadores por las pocas ganas demostradas en el terreno de juego, pero esta fue la imagen que dio el equipo en la primera vuelta salvo contadas excepciones, como el 5-0 contra el Cordoba, una semana después del partido contra el Sabadell, o la victoria contra el Real Madrid por 2-0. El Valencia perdió contra el Elche de Di Stefano, y también contra el Barcelona, Pontevedra y Real Sociedad.
Y llegó el 10 de Diciembre el partido contra el Español en el Sarriá. Era la duodécima jornada y el Valencia hizo el mejor partido de la temporada. La primera parte concluyó con derrota valenciana por 4-1 y en la segunda un Valencia a por todas no solo empató el partido sino que a falta de cinco minutos para el final Waldo marcó un golpe franco que hizo enmudecer a los seguidores españolistas. Resultado final 4-5 (2 de Waldo, 2 de Ansola y Paquito).
Este partido dio alas al Valencia, que finalizó la primera vuelta en sexta posición, al sumar 16 puntos, cinco menos que el líder, el Atlético de Madrid, comenzando una buena racha de trece partidos sin perder con los que se consiguieron 20 puntos. Esta serie de resultados exitosos, devolvió a la escuadra valencianista sus maltrechas esperanzas de aspirar al título, pues a la conclusión de la vigesimotercera jornada, el Valencia se encontraba tercero, a tres puntos del primero, el Real Madrid. Fue entonces cuando el equipo entrenado por Mundo comenzó a perder fuelle, hasta concluir el torneo en cuarto lugar con 34 puntos, a ocho del campeón, el Real Madrid, y por detrás de Barcelona y Las Palmas.
El aspecto más positivo del campeonato para el Valencia fue la consagración del tándem formado por Waldo y Ansola, que anotaron 11 y 12 goles respectivamente. También supuso la eclosión del joven Pep Claramunt, cuya prodigiosa actuación frente al Pontevedra (6-2), con hat-trick incluido, le sirvió de escaparate para demostrar a los aficionados la calidad que atesoraba.
En la liga se marcaron 51 goles repartidos de la siguiente forma: Ansola (12 goles), Waldo (11 goles), Claramunt (7 goles), Guillot (6 goles), Pesudo (4 goles), Roberto, Paquito y Cayuela (3 goles), Terol y Jara (2 goles), Poli y Nolito (1 gol).
Copa del Generalísimo
El Valencia se enfrentó a la Real Sociedad Gimnástica de Torrelavega, que venía de eliminar al CD Mestalla, en los dieciseisavos de final de la Copa del Generalísimo. No tuvo el más mínimo problema para acceder a la siguiente ronda, y el 5-0 conseguido en Mestalla el 11 de mayo de 1968, con goles de Claramunt, Waldo, Poli, Guillot y Pepín en propia puerta, convirtió el partido de vuelta en una mera formalidad, aunque Mundo se lo tomó muy en serio y alineó a un once muy competitivo en El Malecón una semana después, donde el Valencia volvió a ganar, en esta ocasión por 0-1, con un tanto anotado por Ansola.
Más dura resultó, sin embargo, la eliminatoria de octavos de final, frente a un rival de mayor enjundia, el RCD Español, que todavía se encontraba dolorido por la remontada que había protagonizado el Valencia en Sarriá unos meses antes en el Campeonato Nacional de Liga. Un solitario gol de Re a los seis minutos de juego del partido de ida, disputado el 25 de mayo, hizo peligrar la continuidad de los valencianos en la competición, aunque bien pudieron haber regresado de Barcelona con un marcador en contra más amplio.
En Mestalla, el 1 de junio, el Español saltó al césped tratando de que se jugara al fútbol el mínimo tiempo posible. Para tal fin, hizo gala de una variada colección de patadas, codazos y empujones. Hasta el portero paraguayo Romero se encargó de soliviantar con sus gestos al respetable valencianista que llenaba el estadio, y que respondió a la provocación con el lanzamiento de toda clase de objetos, almohadillas incluidas. Afortunadamente, dos goles de Guillot y Ansola voltearon la eliminatoria, y el Valencia pudo celebrar s pase a los cuartos de final, donde le esperaba su verdugo en la competición durante la mayor parte de los años sesenta: el Atlético de Madrid.
El partido de ida de los cuartos de final se disputó el 8 de junio de 1968 en el Manzanares, con un Valencia un tanto reservón que tejió una telaraña en el centro del campo para no dejar elaborar su fútbol a la línea medular atlética. El conjunto colchonero se adelantó en el marcador en el minuto 14, merced a una jugada de Ufarte. Con el 1-0 se llegó al tramo final del choque. Ansola tuvo el empate en sus botas, pero Griffa salvó bajo los palos cuando San Román ya estaba batido. Una ocasión desaprovechada que terminó pagándose muy caro.
En el partido de vuelta, disputado una semana después en Mestalla, la excelente actuación de un Guillot que se echó el equipo a sus espaldas, no fue suficiente para que el Valencia superara la eliminatoria. Muy pronto abrió el marcador el equipo valencianista por medio del delantero de Aldaia, que transformó una pena máxima cometida sobre él mismo. Pero el infortunio se cebó con el Valencia, que en el minuto 7 encajó un autogol de Roberto al intentar despejar un balón lanzado por Calleja. Pese a que el juego no era brillante, Mundo adelantó sus líneas y consiguió llegar con peligro a la meta rival en múltiples ocasiones. En una de ellas, Cayuela volvió a adelantar a su equipo, al culminar un pase de Sol tras una espléndida jugada de Guillot. Sin embargo, en la segunda mitad, dos goles de Luis Aragonés y de Gárate acabaron con las ilusiones blancas, eliminando una vez más al Valencia en la competición copera.
Recopa de Europa
Por primera vez en su historia participó el Valencia CF en la Copa de Europa de Campeones de Copa, comúnmente denominada Recopa de Europa. El título de la Copa del Generalísimo que conseguido la temporada pasada, dio al club el pasaporte para jugar esta competición.
El conjunto valencianista inició su andadura por la competición en Mestalla, frente el Crusaders de Belfast, un equipo de jugadores fuertes pero de poca calidad futbolística. El 4-0 final, con goles de Ansola (2), Jara (de penalty) y Waldo, dejó patente la superioridad de la escuadra valencianista sobre el campeón de Copa norirlandés. Este fue el primer once que alineó el Valencia en este torneo europeo: Abelardo, Sol, Mestre, Vidagany, Roberto, Paquito, Terol, Waldo, Ansola, Claramunt y Jara.
Con las novedades de Tatono por Sol, de Vilar por Mestre y de Catalá Benet por Terol, se presentó el conjunto valencianista en Seaview, estadio en el que se volvió a pasar por encima del Crusaders, ganando por 2-4. Trainor adelantó al equipo local, pero Paquito, con tres goles, y Ansola, incrementaron la diferencia valencianista en la eliminatoria, que Magill sólo pudo recortar mínimamente.
El Estrella Roja de Bucarest fue el rival del Valencia en los octavos de final. Mestalla acogió el partido de ida el 30 de noviembre de 1967, en un partido en el que la eliminatoria quedó casi sentenciada gracias a los goles de Claramunt y Ansola (2). Mundo formó con Abelardo, Tatono, Mestre, Vidagany, Roberto, Paquito, Cayuela, Waldo, Ansola, Claramunt y Guillot.
El 3-0 obtenido en Mestalla no parecía hacer peligrar la eliminatoria, pese a que en el Estadio de la República de la capital rumana recibió al equipo blanco el 14 de diciembre con un césped totalmente cubierto por la nieve. El único tanto de Constantino no inquietó al Valencia, que presentó dos novedades en su alineación respecto a la ida: Vilar por Tatono y Arnal por Cayuela.
Pero en el siguiente sorteo, el bombo deparó un rival de armas tomar para los cuartos de final: el Bayern de Munich, vigente campeón de la competición. Mestalla fue testigo del partido de ida, un choque brillante disputado el 14 de febrero de 1968, en el que el Valencia tuvo la suerte de espaldas. Mestre anotó el gol germano en propia puerta a falta de un cuarto de hora del final, y los delantero valencianistas estrellaron hasta tres balones en la madera de la portería defendida por un soberbio Maier, que realizó varias paradas de mérito. Vilar había adelantado al equipo valenciano en el minuto 4. Mundo alineó en esta ocasión a Abelardo, Tatono, Mestre, Vidagany, Vilar, Roberto, Terol, Waldo, Ansola, Waldo y Claramunt.
En el partido de vuelta, disputado el 13 de marzo en el Grünwalder Stadion muniqués, un gol tempranero de Müller en el minuto tres finiquitó las esperanzas valencianistas, cuyo decidido y continuado ataque, mermado por la baja de Ansola, no tuvo la recompensa merecida. Dos novedades presentó el técnico valencianista respecto al choque de Mestalla: Cayuela ocupó la plaza de Terol y Poli la de Ansola. Fue una verdadera lástima, pues de no haber sido por la fortuna esquiva, el Valencia podía haber llegado más lejos en una competición que terminó conquistando el AC Milan, al imponerse en la final al Hamburgo alemán por 2-0.
Plantilla de la temporada 1967-1968
Presidente | Julio de Miguel |
Entrenador | Edmundo Suárez "Mundo" |
Porteros | Abelardo, Pesudo, Valero |
Defensas | Arnal, Mestre, Sol, Tatono, Vidagany |
Medios | Catalá Benet, Cayuela, Claramunt, Paquito, Roberto, Vilar |
Delanteros | Ansola, Blayet, Guillot, Jara, Nolito, Poli, Terol, Waldo |