Ficha de partido
Valencia CF
1 - 1
Sporting Gijón
Equipos titulares
Timeline del partido
Inicio del partido
0'
Descanso
45'
UrrechoCundi
54'
Mesa
62'
Mario Kempes
64'
Abel
68'
Antonio MontesPablo Rodríguez
70'
Maceda
75'
DavidNacho
79'
Mario KempesAsist: Daniel Solsona
80'
Final del partido
90'
Estadio
Rival: Sporting Gijón
Records vs Sporting Gijón
Máximo goleador: Vicente Seguí (7 goles)
Goleador rival: Quini (13 goles)
Más partidos: Fernando Gómez (25 partidos)
Mayor victoria: 8 - 0 (29.11.1953)
Mayor derrota: 1 - 6 (20.01.1982)
Más repetido: 1-1 (15 veces)
Crónica
Partido jugado en el Estadio Luis Casanova, ante unos 30.000 espectadores en una noche de buena temperatura. Se anticipó el encuentro debido a que el Valencia tiene que disputar el próximo miércoles su correspondiente partido de la Copa de la UEFA, contra el Spartak de Moscú. Dirigió el encuentro el colegiado guipuzcoano Urío Velázquez, el cual hizo un arbitraje discreto, tan sólo con algunos despistes en la aplicación de la ley de la ventaja. Siguió el juego de loejos permitiendo al principio algunas durezas que merecían amonestación. Posteriormente ya sacó tarjetas, exhibiéndolas a los 19 minutos de la segunda parte a Kempes, por protestar, a los 23 a Abel por entrada dura y a los 30 a Maceda por protestar.
Goles: 0-1, minuto 18 de la segunda parte. Mesa elude una violenta entrada de Kempes y desde 30 metros lanza un fortísimo disparo que entra por el ángulo derecho de la portería de Bermell. Un gran gol por el tiro parabólico. 1-1, minuto 35 de la segunda parte. Falta contra el Gijón, a unos tres metros del área de penalty. Parece disponerse a ejecutarla Solsona, pero es Kempes quien de un fuerte zurdazo cruza el balón a la red a pesar del esfuerzo de Castro.
Casi podría decirse que el Valencia no ha perdido hoy un punto, sino que lo ha salvado en este difícil encuentro frente al Sporting de Gijón, en el que estuvo perdiendo por 0-1. De todas formas el cuadro levantino ve aumentada su cuenta a cinco negativos, lo que crea una situación alarmante. Es el caso, sin embargo, que indudablemente bajo la mano de Miljanic ha mejorado el juego del Valencia y hoy se advirtió en la primera parte, como ocurriera también hace dos semanas con ocasión del partido contra el Español. En aquella primera parte hizo un fútbol de auténtica calidad y hoy, aunque no haya estado a la misma altura, el juego colectivo del equipo ha tenido en cambio algunos chispazos individuales de mérito. Entre los cuales hay que resaltar la casi resurrección que ha venido operando en Kempes, un Kempes al que hoy hemos visto no sólo con grandes destellos de su extraordinaria clase, sino con un espíritu de lucha que parecía olvidado por él. Y es más, ha estado tan trabajador que a los 28 minutos salvó magistralmente un balón que se colaba en la puerta de Bermell, impulsado por Esteban, con un tiro que envió la pelota a córner. Y sería Kempes el autor de ese empate, casi in-extremis, en otro de sus clásicos remates con la izquierda.
En la primera parte, salvo los primeros minutos en que el Gijón hizo acto de presencia en el campo con un excelente juego, fue el Valencia el que se impuso, pero acreditando lo que viene siendo un defecto muy consustancial en este Valencia de la presente temporada, y es su falta de remate. Tiró bastante a gol, especialmente Solsona, pero lo hizo con desacierto. Kempes, que tiró menos, estuvo más afortunado en este menester como lo estuvo por el lado contrario, salvando un gol en la propia puerta merengue.
Así, a pesar de que dominó mucho el Valencia, que lanzó seis córners contra la puerta de Castro, en algunos momentos, sobre todo en torno a los 11 minutos y a los 23, creó auténticos peligros, no se movió el marcador. Y fue el Gijón el que lo abriría en la segunda parte con un sensacional tanto marcado por Mesa al que le salió un tiro con efecto que era materialmente imparable.
Poco antes hubo una gran jugada de Pablo apurándola hasta la línea de fondo para centrar el balón sobre puerta, donde entró Saura pero falló lo que podría haber sido un gol para el Valencia. Posteriormente, a raiz de marcar el Gijón, el Valencia, nervioso, se lanzó a una impetuosa e inquieta ofensiva que le dio el mando del partido ante un Gijón que acumuló a todos sus hombres para defender la ventaja que tenía. Así y todo, llegó el gol del empate y cinco minutos más tarde pudo haber llegado también el tanto que diera la victoria al Valencia, promovido en una codiciosa jugada llevada por Carrete y que originó un follón reiterado en el área de penalty del Gijón. Total, acabó con empate a uno, que ciertamente por el juego desplegado por uno y otro equipo es poco para el Valencia, pero en definitiva premia también los indiscutibles méritos de un Gijón que venía imbatido y que ha salido del campo de Mestalla también imbatido. Sin hacer un gran fútbol, pero sabiendo nadar y guardar la ropa, que es otra circunstancia a tener en cuenta en el fútbol. En resumen, para el Valencia la cuenta de negativos ya llega a cinco y se pone en una situación inquietante de cara al inmediato futuro.
Goles: 0-1, minuto 18 de la segunda parte. Mesa elude una violenta entrada de Kempes y desde 30 metros lanza un fortísimo disparo que entra por el ángulo derecho de la portería de Bermell. Un gran gol por el tiro parabólico. 1-1, minuto 35 de la segunda parte. Falta contra el Gijón, a unos tres metros del área de penalty. Parece disponerse a ejecutarla Solsona, pero es Kempes quien de un fuerte zurdazo cruza el balón a la red a pesar del esfuerzo de Castro.
Casi podría decirse que el Valencia no ha perdido hoy un punto, sino que lo ha salvado en este difícil encuentro frente al Sporting de Gijón, en el que estuvo perdiendo por 0-1. De todas formas el cuadro levantino ve aumentada su cuenta a cinco negativos, lo que crea una situación alarmante. Es el caso, sin embargo, que indudablemente bajo la mano de Miljanic ha mejorado el juego del Valencia y hoy se advirtió en la primera parte, como ocurriera también hace dos semanas con ocasión del partido contra el Español. En aquella primera parte hizo un fútbol de auténtica calidad y hoy, aunque no haya estado a la misma altura, el juego colectivo del equipo ha tenido en cambio algunos chispazos individuales de mérito. Entre los cuales hay que resaltar la casi resurrección que ha venido operando en Kempes, un Kempes al que hoy hemos visto no sólo con grandes destellos de su extraordinaria clase, sino con un espíritu de lucha que parecía olvidado por él. Y es más, ha estado tan trabajador que a los 28 minutos salvó magistralmente un balón que se colaba en la puerta de Bermell, impulsado por Esteban, con un tiro que envió la pelota a córner. Y sería Kempes el autor de ese empate, casi in-extremis, en otro de sus clásicos remates con la izquierda.
En la primera parte, salvo los primeros minutos en que el Gijón hizo acto de presencia en el campo con un excelente juego, fue el Valencia el que se impuso, pero acreditando lo que viene siendo un defecto muy consustancial en este Valencia de la presente temporada, y es su falta de remate. Tiró bastante a gol, especialmente Solsona, pero lo hizo con desacierto. Kempes, que tiró menos, estuvo más afortunado en este menester como lo estuvo por el lado contrario, salvando un gol en la propia puerta merengue.
Así, a pesar de que dominó mucho el Valencia, que lanzó seis córners contra la puerta de Castro, en algunos momentos, sobre todo en torno a los 11 minutos y a los 23, creó auténticos peligros, no se movió el marcador. Y fue el Gijón el que lo abriría en la segunda parte con un sensacional tanto marcado por Mesa al que le salió un tiro con efecto que era materialmente imparable.
Poco antes hubo una gran jugada de Pablo apurándola hasta la línea de fondo para centrar el balón sobre puerta, donde entró Saura pero falló lo que podría haber sido un gol para el Valencia. Posteriormente, a raiz de marcar el Gijón, el Valencia, nervioso, se lanzó a una impetuosa e inquieta ofensiva que le dio el mando del partido ante un Gijón que acumuló a todos sus hombres para defender la ventaja que tenía. Así y todo, llegó el gol del empate y cinco minutos más tarde pudo haber llegado también el tanto que diera la victoria al Valencia, promovido en una codiciosa jugada llevada por Carrete y que originó un follón reiterado en el área de penalty del Gijón. Total, acabó con empate a uno, que ciertamente por el juego desplegado por uno y otro equipo es poco para el Valencia, pero en definitiva premia también los indiscutibles méritos de un Gijón que venía imbatido y que ha salido del campo de Mestalla también imbatido. Sin hacer un gran fútbol, pero sabiendo nadar y guardar la ropa, que es otra circunstancia a tener en cuenta en el fútbol. En resumen, para el Valencia la cuenta de negativos ya llega a cinco y se pone en una situación inquietante de cara al inmediato futuro.